Un cop decidida la invasió de Mallorca, i l'alliberament dels nebots del rei de Castella, Pere cau malalt. Un vulgar constipat que, als seus 45 anys, el durà en pocs dies a la mort.
Estem a finals d'octubre o principis de novembre de 1285
Estem a finals d'octubre o principis de novembre de 1285
CXLIII
Y habiendo salido de Barcelona, luego de haberse levantado de madrugada, se resfrió, y con aquel resfriado le entró la fiebre. De modo que todo el camino padeció de tal forma, que hubo de detenerse en Sent Climent (676) aquel día. Y enviaron correos a Barcelona a maestre Arnau de Vilanova (677), que se encontraba allí, y a otros médicos; y aquella noche acudieron junto a él, a Sent Climent. Y maestre Arnau y los otros le mandaron orinar por la mañana, y lo guardaron; y todos dijeron que tenía una conmoción debida al frío, pero que no era nada. Y cabalgó aquel día hasta llegar a Vilafranca de Penedès; y cuando llegó, el mal se le había envenenado, y su fiebre era bastante alta. Y cuando le hubo bajado la fiebre, hizo venir a su escribano, con el que trataba de los asuntos secretos, y redactó ordenadamente su testamento durante aquel día, y lo revisó durante los dos días siguientes; y una vez todo revisado y redactado a su plena voluntad, lo hizo publicar, y recibió como testigos a prelados, y ricoshombre, y caballeros y honrados ciudadanos, y villanos. Y tras haber hecho esto, se confesó muchas veces, con obispos, y con el abad de Santes Creus , y con predicadores, y con frailes menores, y limpió a fondo su conciencia. Y luego recibió al Salvador muy devotamente, y con gran contrición y devoción, y en presencia de todos cuantos cupieron en la habitación; y con llanto y lágrimas que brotaban de sus ojos, comulgó; y de igual modo lloraban todos los que allí había. Y cuando esto acabó, pidió y quiso que lo ungiesen con la extremaunción, y así se hizo; de esta forma recibió todos los sacramentos de la santa Iglesia con gran devoción y con gran contrición de sus pecados.
Y hecho todo esto, la enfermedad seguía envenenándole sin descanso, de modo que la noticia se esparció por toda la tierra, e incluso llegó al señor infante N'Anfòs, quien ya había embarcado, y en cuanto la oyó, celebró consejo y regresó. Y cuando llegó junto al rey, y el señor rey lo vio, le espetó:
- Infante, ¿quién os ha dado este mal consejo de que acudieseis a nos? ¿Acaso sois médico, vos, y nos podéis ofrecer un remedio a nuestra enfermedad? Bien sabemos que no lo sois, de modo que no os necesitamos. Incluso aunque placiera a nuestro señor verdadero Dios que en este punto rindiéramos la vida, tampoco os necesitaríamos, puesto que ya nos hemos hecho nuestro testamento y lo hemos publicado. Por lo que id inmediatamente, y embarcaos en buena hora, que vuestra expedición es muy buena, tanto para Dios, como para nuestro reino, como para nuestro hermano el rey de Mallorca; y cualquier demora podría redundarnos en gran daño.
Y tras esto el señor infante, llorando, le besó los pies y las manos. Y el señor rey lo abrazó y lo besó en la boca, y le dio su bendición, y lo persignó más de veinte veces. E inmediatamente se puso en camino, y marchó a embarcarse en Salou, con la gracia de Dios.
NOTAS
Y hecho todo esto, la enfermedad seguía envenenándole sin descanso, de modo que la noticia se esparció por toda la tierra, e incluso llegó al señor infante N'Anfòs, quien ya había embarcado, y en cuanto la oyó, celebró consejo y regresó. Y cuando llegó junto al rey, y el señor rey lo vio, le espetó:
- Infante, ¿quién os ha dado este mal consejo de que acudieseis a nos? ¿Acaso sois médico, vos, y nos podéis ofrecer un remedio a nuestra enfermedad? Bien sabemos que no lo sois, de modo que no os necesitamos. Incluso aunque placiera a nuestro señor verdadero Dios que en este punto rindiéramos la vida, tampoco os necesitaríamos, puesto que ya nos hemos hecho nuestro testamento y lo hemos publicado. Por lo que id inmediatamente, y embarcaos en buena hora, que vuestra expedición es muy buena, tanto para Dios, como para nuestro reino, como para nuestro hermano el rey de Mallorca; y cualquier demora podría redundarnos en gran daño.
Y tras esto el señor infante, llorando, le besó los pies y las manos. Y el señor rey lo abrazó y lo besó en la boca, y le dio su bendición, y lo persignó más de veinte veces. E inmediatamente se puso en camino, y marchó a embarcarse en Salou, con la gracia de Dios.
NOTAS
676. Sant Climent de Llobregat. Municipio en el Baix Llobregat. Barcelona.
677. Arnau de Vilanova. (? 1238/40 - Génova 1311) Médico, reformista espiritual y escritor en catalán y en latín.
678. Santa María de Santes Creus. Antiguo monasterio cisterciense enclavado en el municipio de Aiguamúrcia, en el Alt Camp. Tarragona. El abad al que se refiere es el abad Gener.
Al final no he podido seguirlas...
ResponEliminaun beso