Contestació del papa Martí a Carles d'Anjou: "Tens tota la raó fillet, t'ajudarem", així que, amb l'església al seu costat, Carles es prepara per anar a veure el seu nebot rei de França.
LXXVIII
E inmediatamente el papa respondió:
- Ahijado de la santa Iglesia: hemos comprendido perfectamente todo lo que habéis dicho, y respondemos a las cuatro razones que nos habéis expuesto para que nos veamos obligados a ayudaros. Y a la primera os respondemos que ciertamente estamos de acuerdo con vos en que os debemos ayudar, y en todo cuanto podamos ayudaros, contra cualquier persona que contra vos vaya; y esto haremos con mucho gusto. La otra, que nos decís que es culpa nuestra que el rey de Sicília haya ido contra Sicília, os lo otorgamos; que en aquel momento en que le dijimos que no, y en aquel punto, sabemos que más nos empujó el corazón que la razón; por lo que reconocemos nuestra culpa, y que por tanto estamos obligados a ayudaros en cualquier cosa. La tercera, de la cruzada y del veto, os prometemos que antes que vos os marchéis de aquí, así se hará y se proveerá. Y la cuarta, del tesoro que nos pedís, y que consideremos al rey de França como portaestandarte de la Iglesia, muy a gusto lo haremos, y estamos preparados para abasteceros a vos y al rey de França de dinero. Y así, alegraos y reconfortaos que de todo lo que vos pedís, la santa Iglesia dará cumplimiento.
Y después de esto hablaron los cardenales, y cada uno ratificó lo que el santo padre había dicho. Y así el rey Carles quedó muy reconfortado y contento; y les dio muchas gracias por la buena respuesta, y les rogó que inmediatamente le proporcionasen todo lo solicitado, ya que él había de ir a donde su sobrino el rey de França, y pedir socorro y ayuda, y que con él acudiese a Bordeu. Y así el papa proveyó de tal manera contra el señor rey de Aragón, que en pocos días dio la sentencia y cruzada contra el rey de Aragón y su tierra y contra todos los que le proporcionasen ayuda o socorro, y absolvió de pecado y de culpa a todos los que contra él viniesen. Y esta sentencia dio papa Martí (437), que era francés. Y dícese que jamás salió de la corte de Roma sentencia que no fuera justa; y así lo debemos todos creer, que dicen los clérigos, que son administradores de la santa Iglesia, que "sentencia pastoris, justa vel injusta tenenda est" y así deben creerlo todos los fieles cristianos, y así lo creo yo. Por lo que esta ayuda fue muy grande y la mayor que la santa Iglesia pudo hacer a ningún señor, y la que más temida debe ser por todo fiel cristiano.
NOTAS
- Ahijado de la santa Iglesia: hemos comprendido perfectamente todo lo que habéis dicho, y respondemos a las cuatro razones que nos habéis expuesto para que nos veamos obligados a ayudaros. Y a la primera os respondemos que ciertamente estamos de acuerdo con vos en que os debemos ayudar, y en todo cuanto podamos ayudaros, contra cualquier persona que contra vos vaya; y esto haremos con mucho gusto. La otra, que nos decís que es culpa nuestra que el rey de Sicília haya ido contra Sicília, os lo otorgamos; que en aquel momento en que le dijimos que no, y en aquel punto, sabemos que más nos empujó el corazón que la razón; por lo que reconocemos nuestra culpa, y que por tanto estamos obligados a ayudaros en cualquier cosa. La tercera, de la cruzada y del veto, os prometemos que antes que vos os marchéis de aquí, así se hará y se proveerá. Y la cuarta, del tesoro que nos pedís, y que consideremos al rey de França como portaestandarte de la Iglesia, muy a gusto lo haremos, y estamos preparados para abasteceros a vos y al rey de França de dinero. Y así, alegraos y reconfortaos que de todo lo que vos pedís, la santa Iglesia dará cumplimiento.
Y después de esto hablaron los cardenales, y cada uno ratificó lo que el santo padre había dicho. Y así el rey Carles quedó muy reconfortado y contento; y les dio muchas gracias por la buena respuesta, y les rogó que inmediatamente le proporcionasen todo lo solicitado, ya que él había de ir a donde su sobrino el rey de França, y pedir socorro y ayuda, y que con él acudiese a Bordeu. Y así el papa proveyó de tal manera contra el señor rey de Aragón, que en pocos días dio la sentencia y cruzada contra el rey de Aragón y su tierra y contra todos los que le proporcionasen ayuda o socorro, y absolvió de pecado y de culpa a todos los que contra él viniesen. Y esta sentencia dio papa Martí (437), que era francés. Y dícese que jamás salió de la corte de Roma sentencia que no fuera justa; y así lo debemos todos creer, que dicen los clérigos, que son administradores de la santa Iglesia, que "sentencia pastoris, justa vel injusta tenenda est" y así deben creerlo todos los fieles cristianos, y así lo creo yo. Por lo que esta ayuda fue muy grande y la mayor que la santa Iglesia pudo hacer a ningún señor, y la que más temida debe ser por todo fiel cristiano.
NOTAS
437. Martín IV, nacido Simon de Brie en Touraine (Francia) y elegido papa en 1281 tras seis meses de conclave gracias a que Carlos de Anjou encarceló convenientemente a dos cardenales italianos lo que decantó los votos a su favor. Fue entronizado en Orvieto ya que en Roma hubiera resultado imposible por tener a todo el pueblo romano en contra. Nunca llegó a pisar Roma. Murió en 1285 en Perugia. Como veremos excomulgó a Pere el Gran, y le desposeyó (sin éxito, todo hay que decirlo) de sus reinos, lo que provocó una invasión francesa fracasada que será relatada en esta crónica.
2 comentaris:
Este episodio me recuerda mucho a las cruzadas de los papas de los coj... contra los templarios y los catars. ¡Indulgencia plenaria para todo quisqui! ¡Licencia para hacer con ellos lo que os salga de los coj...!
Ya vez, hoy vengo echando humos.
Sahha bin Salam.
Daniel.
Ya verás lo que le dicen al rey de Francia
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