La preparació.
IV
IV
Y cuando el caballero entendió y oyó su razonamiento, que era santo y justo, dijo que estaba preparado a cumplir todo lo que ellos le habían dicho, y que no se privaría de ello por temor de perder el amor del señor rey y ni siquiera la vida: y que confiaba en nuestro señor verdadero Dios que tal como ellos lo habían ideado y proyectado, él lo llevaría a buen término, y que podían estar seguros de ello.
- Pero sin embargo, señores –dijo el caballero -, ya que lo habéis ideado tan bien, yo os rogaría encarecidamente que hicierais otra cosa más.
Y ellos dijeron:
- Estamos dispuestos a hacer lo que vos aconsejéis.
- Pues, señores, en honor de Dios y de madona Santa María de Vallvert, hoy es sábado, día en que hemos comenzado a tratar estos asuntos: os ruego y aconsejo que el próximo lunes, en honor de Dios y de madona santa María, empiecen todos cuantos presbíteros y hombres de orden haya en Montpesller, a cantar misas en honor de madona santa María, y háganlo siete días por los siete gozos que ella tuvo de su querido hijo; y para que le plazca que a todos nosotros nos dé Dios gozo y alegría en este asunto, y que dé fruto de forma que el reino de Aragón y el condado de Barcelona, el de Urgell y Montpesller, y todas las otras tierras estén siempre bien provistas de buen señor. Asimismo dispondría que el domingo siguiente a hora de vísperas se realizara todo lo acordado anteriormente, y asimismo que se hiciesen cantar misas a madona Santa María de Vallvert.
Y todos estuvieron de acuerdo con esto. Y además dispusieron que el domingo que esto sucedería, todas las gentes de Montpesller acudiesen a las iglesias y que todos velaran diciendo oraciones mientras la reina estuviera con el rey; y que todo el mundo hubiese ayunado el sábado a pan y agua.
Y así fue dispuesto y preparado. Y después de esto, todos unidos, tal como lo habían estado en el consejo, acudieron ante madona María de Montpesller, reina de Aragón, y le contaron todo lo que habían dispuesto. Y la mencionada dama les dijo que ellos eran sus naturales, y que era muy cierto que en todo el mundo se decía que el más sabio consejo del mundo era el de Montpesller; y así como todo el mundo lo testimoniaba, a ella le parecía que debía darse por contenta con su consejo y que aceptaba su venida como la de la salutación que el ángel Gabriel hizo a madona santa María; y que tal como aquella salutación se cumplió para salvación del humano linaje, así alcanzase su acuerdo buen término y fuese agradable a Dios y a madona santa María y a toda la verdadera corte celestial y redundase en honor y provecho del alma y del cuerpo del señor rey y de ella misma y de todos sus súbditos, y que así se cumpliese, amén.
Y así se despidieron con gran alegría, y podéis imaginar que todos estuvieron aquella semana en oraciones y en ayunos, y principalmente la señora reina.
- Pero sin embargo, señores –dijo el caballero -, ya que lo habéis ideado tan bien, yo os rogaría encarecidamente que hicierais otra cosa más.
Y ellos dijeron:
- Estamos dispuestos a hacer lo que vos aconsejéis.
- Pues, señores, en honor de Dios y de madona Santa María de Vallvert, hoy es sábado, día en que hemos comenzado a tratar estos asuntos: os ruego y aconsejo que el próximo lunes, en honor de Dios y de madona santa María, empiecen todos cuantos presbíteros y hombres de orden haya en Montpesller, a cantar misas en honor de madona santa María, y háganlo siete días por los siete gozos que ella tuvo de su querido hijo; y para que le plazca que a todos nosotros nos dé Dios gozo y alegría en este asunto, y que dé fruto de forma que el reino de Aragón y el condado de Barcelona, el de Urgell y Montpesller, y todas las otras tierras estén siempre bien provistas de buen señor. Asimismo dispondría que el domingo siguiente a hora de vísperas se realizara todo lo acordado anteriormente, y asimismo que se hiciesen cantar misas a madona Santa María de Vallvert.
Y todos estuvieron de acuerdo con esto. Y además dispusieron que el domingo que esto sucedería, todas las gentes de Montpesller acudiesen a las iglesias y que todos velaran diciendo oraciones mientras la reina estuviera con el rey; y que todo el mundo hubiese ayunado el sábado a pan y agua.
Y así fue dispuesto y preparado. Y después de esto, todos unidos, tal como lo habían estado en el consejo, acudieron ante madona María de Montpesller, reina de Aragón, y le contaron todo lo que habían dispuesto. Y la mencionada dama les dijo que ellos eran sus naturales, y que era muy cierto que en todo el mundo se decía que el más sabio consejo del mundo era el de Montpesller; y así como todo el mundo lo testimoniaba, a ella le parecía que debía darse por contenta con su consejo y que aceptaba su venida como la de la salutación que el ángel Gabriel hizo a madona santa María; y que tal como aquella salutación se cumplió para salvación del humano linaje, así alcanzase su acuerdo buen término y fuese agradable a Dios y a madona santa María y a toda la verdadera corte celestial y redundase en honor y provecho del alma y del cuerpo del señor rey y de ella misma y de todos sus súbditos, y que así se cumpliese, amén.
Y así se despidieron con gran alegría, y podéis imaginar que todos estuvieron aquella semana en oraciones y en ayunos, y principalmente la señora reina.
1 comentari:
Uy niño te comento en privedo.
BESINES
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