Crònica de Ramon Muntaner (X)

Conquistat i fundat el Regne de València, com s'ha vist al capítol anterior, no per això ha arribat la pau. Els musulmans s'aixequen en armes, ajudats pels regnes de Murcia i Granada.

El rei en Jaume envia el seu fill Pere a sufocar la rebel·lió.

X

Y estando en tal solaz y placer, los sarracenos del reino de Valencia que con él habían acordado treguas y paz, se levantaron al saber que el señor rey andaba lejos, y que antes de que pudiese regresar, podrían recuperar muchos castillos y lugares. Y así se confabularon entre ellos, con el consejo y ayuda del rey de Murcia y del rey de Granada, y se alzaron en armas en las fronteras contra los castillos que pudieron recuperar, de los cuales capturaron muchos antes que los cristianos se hubieran apercibido. Y corrieron toda la tierra, y cautivaron muchos cristianos, e hicieron mucho daño.

Y enseguida el procurador del reino y los ricoshombre y la ciudad y las villas y los lugares, enviaron sus mensajes al señor rey y le hicieron saber toda la verdad de los hechos, de lo que él se apenó mucho. Y enseguida dispuso que el señor infante En Pere (118), su hijo mayor, se preparase para acudir al reino de Valencia, y que se dotase de compañía de caballeros de Catalunya y de Aragón. Y le dio todo el poder en todas las cosas tal como si fuera él mismo.

Y el señor infante En Pere, como era de más alto coraje y mejor que nadie que hubiese nacido ni creo que nazca, con gran contento y alegría recibió dicho apoderamiento. Y se despidió del rey su padre, quien lo bendijo y lo persignó y le dio su bendición. Y enseguida se puso en camino hacia el reino de Valencia con ricoshombre, caballeros y peones de Catalunya y Aragón. Y cuando llegó a la ciudad de Valencia, dispuso a sus ricoshombre y caballeros ciudadanos, y almogávares (119) y peones de mesnada, y hombres de mar; y los situó allá donde vio que más falta hacían.

Y él se dirigió hacia Xàtiva, y así se encontró con los moros, que eran un gran número, en la canal de Alcoi, y los derrotó y los llevó a todos a muerte y confusión.

Y luego fue a otra parte e hizo otro tanto: de forma que cuando alguien creía que estaba en un lugar él ya se encontraba en otro, y allá donde no podía llegar a caballo, iba a pie con los almogávares. Y de este modo condujo tan bravamente la guerra, que los sarracenos no sabían qué hacer; que allá donde pensaban estar a salvo, allí mismo los capturaba y los mataba, y cautivaba a los que quería: de forma, que la muerte y el miedo se les metió en el corazón, de modo que no sabían a qué atenerse.

Y así decidieron refugiarse en un castillo fortificado que se encuentra a una legua de Xàtiva, que se llama Montesa (120), y desde aquel lugar castigar a toda la tierra. Y el señor infante tuvo noticia de su propósito por espías que tenía entre ellos, y dejó que se reunieran. Y una mañana, antes de que hubiese amanecido, se situó alrededor del castillo y de la muela con gran multitud de gentes de a pie, y envió por toda su tierra, a sus ricoshombre y caballeros, para que acudiesen, y tal como lo ordenó así se hizo. De modo que acudió la hueste de la ciudad de Valencia y de todas las villas del reino. Y asedió el lugar de Montesa, y lo tuvo de tal modo sitiado, y tan estrechamente, que consiguió que se rindieran.

Y una vez el lugar de Montesa se hubo rendido, todos los lugares que se habían alzado se rindieron: así que bien se puede decir que el señor infante En Pere conquistó por segunda vez parte del reino de Valencia. Así que todos los días llegaban nuevas al rey su padre, sobre las grandes hazañas, caballerías, almogaverías y ataques que el señor infante hacía contra los moros, de lo que él sentía gran gozo y placer.

NOTAS

118. Se trata del futuro Pere II de Catalunya, III de Aragón y I de Valencia. Hijo de Jaime I y de Violante de Hungría. También llamado Pere el Gran. (Pedro el Grande)

119. Cuerpo de mercenarios que en los reinos cristianos hispánicos, servía desde el siglo XIII para hacer incursiones en tierras musulmanas. En la corona catalano-aragonesa, los almogávares se mantenían alejados de los recintos urbanos. Es probable que procediesen de la serranía de Cuenca. Luchaban en cuerpos de infantería, bajo el mando de los adalils y los almogatens; ellos mismos se proveían de alimentos y de armas; en un zurrón llevaban pan para uno o dos días. Iban armados con cuchillo, lanza y dardos; vestían una camisa muy corta, polainas y abarcas de cuero.

120. Municipio de Valencia en la Costera. Su castillo fue el núcleo inicial de la orden militar de Montesa, creada en 1317 por Jaume II, como consecuencia de la supresión de la orden del Temple, ordenada por el concilio de Viena.